Desarrollé la presencia digital para Coffee & Code, una cafetería conceptual ficticia diseñada específicamente para programadores.
El desafío principal radicó en crear una identidad digital que la distinguiera de otras cafeterías, infundiéndole una temática de programación única y auténtica.
Este reto lo solucioné con una visión diferenciadora, desarrollando un menú creativo donde cada producto, como 'El Stack Overflow Sandwich', mezcla la gastronomía con referencias o beneficios para programadores. Esto me permitió crear una interfaz que no solo presenta la marca, sino que conecta genuinamente con su público objetivo y refuerza su identidad distintiva y más atractiva para el nicho.